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Los pedidos ́constantes de aumento generan stress en el empleado y malestar en el empleador, llevan a replantear constantemente solapamientos y perjudican el clima laboral.
Hoy tenemos un gran desafío para mantener actualizada las escales salariales en un entorno inflacionario. Tener una política saludable y conocida de ajuste remuneracional para aquellos puestos que están fuera de convenio, influye directamente en la retención de talentos y en la posibilidad de captar recursos humanos de calidad para la empresa. La clave para detener esta situación poco saludable, es tener una POLITICA SALARIAL DEFINIDA.
Lejos de lo que todos piensan, no es una tarea babiónica, sino muy por el contrario, sólo se necesitan los datos de la nómina, con puestos y salarios brutos, y voluntad política para solucionar el problema.
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